miércoles, 2 de octubre de 2013

FLOR DE UN DIA.Por Sonsoles Martín

FLOR DE UN DIA Hace muchísimos años, en un lugar para nosotros desconocido, existía un bosque muy triste, dominado por una bruja, que no permitía que pudieran nacer ni vivir ninguna clase de flores. La bruja, vivía en una cueva rodeada de enormes cactus, que entrelazaban sus enormes y afiladas púas a modo de empalizada, para evitar que ningún ser viviente penetrara en su habitáculo. Lindando con este bosque y separado por un tranquilo río, había un valle llamado ¨El Vergel de las Plantas¨, estaba regado por cristalinas gargantas y la humedad y frescor del ambiente, hacían que en el Vergel crecieran y vivieran toda clase de flores silvestres. El valle estaba protegido por una DRIADE, que cuidaba de que todo fuera alegre y maravilloso para la vista, pues desde las lomas de alrededor se recreaban los habitantes de aquellas tierras, (sobre todo en primavera) al ver las praderas llenas de flores, con sus multicolores vestidos en forma de pétalos. Las caléndulas, alhelíes, amapolas, clavelinas, violetas, malvas, flores de té, etc. se lamentaban de la tristeza del bosque contiguo, formaron una comisión y cuando soplo el viento las transportó a los dominios de la bruja, llevaban la misión de convencer a la bruja para que permitiera que las plantas pudieran vestir de color, tener flores como ellas y dar alegría al bosque con sus vistosos colores. La bruja enfadada (más que de costumbre), se negó a ello y sus cactus guardianes afilaron sus espinas y atacaron a las flores. Pero, al cabo de un tiempo murió la bruja, entonces las plantas del bosque se rebelaron y fueron al Vergel de las Plantas, a pedir a la DRIADE que las tomara bajo su protección y les otorgara la gracia de tener flores. La DRIADE aceptó su petición y desde aquel momento concedió a los frutales que tuvieran flores en primavera, también los zarzales y los espinos. El bosque había cambiado tanto las plantas estaban tan alegres, que todas se esforzaban para tener las flores más bellas y vistosas. Los cactus envidiosos estaban tristes y no tenían flores y cuando solicitaron a la DRIADE que les concediera florecer, ella les recordó, cómo habían herido a sus flores, aún así se apiadó de ellos y les concedió la floración, pero con la condición de tener una sola y efímera flor cada año, aunque es la flor más maravillosa, pues sabido es, que los cactus tienen flores preciosas y exóticas, pero solo duran un día. DRIADE: Ninfa de los Bosques, cuya vida duraba lo que la del árbol, al que se suponía unida. SONSOLES MARTIN JIMENEZ

No hay comentarios:

Publicar un comentario